Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende un pequeño fuego!
— Santiago 3:5
PENSAMIENTO:
Así como ves que un pequeño fuego puede encender todo un gran bosque así puede también el miembro de la lengua que es pequeño en nuestro cuerpo hacer grandes daños a nosotros mismos y a nuestro alrededor, así que controla lo que tu lengua pueda decir y veras como las cosas cambian para bien en tu vida.
ORACIÓN:
Padre te doy gracias por mi vida, te pido perdón por todos los fuegos que comencé con mi lengua, permíteme cambiar para bien, que pueda yo hacer conforme a tu palabra y que mi lengua pueda servir de instrumento de bien para hablar de tu palabra y poder servir de guía para aquellos que necesitan de ti, todo te lo pido en el nombre de Jesús, amén.
Que Dios te bendiga.
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Comunidad Cristiana Jesús Vive
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